por parte de su presidente Alfonso S. Palomares, como de su secretario, Bartolomé Valle Buenestado y varios otros consejeros. Este órgano deberá ajustarse en breve a la normativa emanada de la LAU que prevé esté compuesto por 26 personas. En este sentido, el Consejo de Gobierno de la Universidad ya dio a conocer, en su sesión del pasado mes de noviembre, los nombres de las siete personas que le corresponde designar. A ellas se añaden, el presidente ( que designa el gobierno andaluz) el rector, el secretario general y la gerente de la universidad, como miembros natos y cuatro representantes del Parlamento de Andalucía, otros tantos miembros designados por el Consejo de Gobierno andaluz, dos más a propuesta de las organizaciones sindicales, otros dos de las organizaciones empresariales, igual número por la Federación Andaluza de Municipios y Provincias y uno por las organizaciones de economía social.

El principal punto del orden del día, que contemplaba la aprobación del presupuesto de la UCO para 2005 por un importe de 112.023.240.000 euros, fue precedido de un informe por parte del vicerrector de Presupuestos y Sociedades Participadas quien comentó algunas de sus principales partidas y el significado que en ellas adquieren acciones como la construcción del edificio Leonardo Da Vinci, la aplicación del Plan de Financiación, el descenso de la matricula del alumnado o el plan de inversiones. Roldán destacó un incremento del 25 % en el programa propio de investigación, otro del 15% en recursos para la docencia y el de un 31% en el Vicerrectorado de Tecnologías de la Información y la Comunicación.

El presidente de la comisión de asuntos económicos del Consejo Social, Bartolomé Cantador, al igual que los miembros del Consejo valoraron muy positivamente la cantidad y calidad de la información aportada por los presupuestos, que han recogido muchas de las sugerencias y aportaciones emanadas de este órgano y cuya elaboración mejora año tras año en un apreciable esfuerzo de ajustarse lo más posible a la realidad. Como aportación a esta continua mejora Cantador resumió distintas propuestas en materia de modificaciones presupuestarias, sociedades participadas, remanentes, información sobre objetivos generales y control interno, entre otras, para finalizar felicitando al equipo económico de la Universidad por haber elaborado lo que consideró un buen presupuesto y, sobre todo, por su trabajo para que cada vez sea mejor.

El Consejo Social aprobó, además, la convocatoria de ocho becas dentro del programa de orientación laboral con el fin de que otras tantas personas realicen labores de apoyo y atención al público en las oficinas de información y orientación laboral existentes en diversos centros del campus. Concretamente 2 serán para las del campus de Rabanales y una para cada una de las existentes en las Facultades de Derecho, Filosofía y Letras, Ciencias de la Educación, Ciencias del Trabajo, Escuela Politécnica Superior y ETSIAM.

Cada una de estas becas estará dotada de 300 euros mensuales y durarán hasta el 30 de octubre de 2005. A este respecto es intención del Consejo dotar de la mayor cualificación posible a estos informadores, de forma que no sólo realicen su trabajo a total satisfacción de quienes se dirijan a estas oficinas sino que incluso se favorezca con ella su futura inserción profesional en este campo. Con tal fin, en colaboración con la Facultad de Ciencias del Trabajo, se llevará a cabo un curso para orientadores por un total de 56 créditos.

El Consejo Social acordó también presentar a la convocatoria de la Universidad de verano Corduba 2005, tres cursos denominados: " Transferencias de tecnología: Universidad, Empresa, Administración"; "Capitalidad cultural 2016: Una oportunidad de creación de empresas" y " Empresas responsables: Oportunidades para el empleo y la sociedad", financiados a su cargo.

En cuanto al cambio de denominación de la Facultad de Derecho por el de Facultad de Derecho y de Ciencias Económicas y Empresariales, y tras un amplio debate, el Consejo acordó no aprobar un cambio de denominación que estimó pudiera inducir a confusión, dado que en el centro no se imparte la titulación de Económicas ni se van a incorporar nuevos estudios, que no sean los ya concedidos, hasta después de 2007. No obstante la decisión podrá ser objeto de reconsideración en una futura sesión del Consejo a la que, desde la Facultad, se aporte más información o mejores argumentaciones y a la que, inclusive, podría invitarse a algún representante del centro como el decano.

Por último se aprobó, a expensas de que el Consejo de Gobierno de la Universidad haga lo propio en su próxima sesión del 22 de diciembre, la asignación singular e individualizada de complementos retributivos ligados a méritos docentes, investigadores y de gestión ( los denominados " complementos autonómicos ") de acuerdo con lo dispuesto en el artículo 36.2 de la LAU, requisito indispensable para que puedan ser incluidos en la nómina de diciembre. También se aprobó, a petición del presidente, la realización de una auditoria sobre la actuación del Consejo Social, por entender que se ha cerrado un ciclo y dejar de esta manera reflejados todos los datos, a modo de informe sobre el "estado de la cuestión", a los próximos consejeros.

Todos los miembros del Consejo elogiaron la labor de Alfonso S. Palomares a lo largo de su mandato, el grado de fluidez y cooperación con que han discurrido las tareas del Consejo Social y los altos niveles alcanzados por este órgano a la hora de realizar sus funciones, mostrando su confianza en que sigan acrecentándose en el futuro. En definitiva, y en palabras de su secretario, Bartolomé Valle, siguiendo a los clásicos, " que siga sabiendo interpretar la armonía de las cosas."