ción, que en su horquilla aceptaba una subida de entre el 3,5 y el 7,5%.

El de la Universidad de Córdoba ha sido el segundo Consejo Social andaluz, por detrás del celebrado en Málaga el pasado viernes 3 de junio, en manifestarse al respecto y llevar su propuesta al Consejo de Universidades, cuya decisión final deberá ser ratificada por el Parlamento de Andalucía.

El pleno celebrado hoy es el primero presidido por Anabel Carrillo, nombrada presidenta por el Consejo de Gobierno andaluz el pasado mes de diciembre, y ha contado con la presencia de los tres representantes del Parlamento de Andalucía en funciones, a la espera de que dicho órgano designe los cuatro representantes definitivos, tal y como marca la Ley Andaluza de Universidades.

Informe de la presidenta
La presidenta del Consejo Social de la Universidad de Córdoba, Anabel Carrillo, aprovechó su primer informe ante el órgano de representación universitario para reclamar a sus miembros una "actitud creativa, propositiva y emprendedora" para lograr que el Consejo Social no continúe limitado "a colaborar en la ratificación de acuerdos remitidos por el Consejo de Gobierno de la Universidad".

La presidente recordó a los consejeros la necesidad de reformular los objetivos del Consejo Social y trabajar por el desarrollo social de Córdoba. En este sentido, Carrillo insistió en la necesidad de vincular los objetivos del Consejo a los planes estratégicos de la provincia. Concretamente, la presidenta del Consejo Social de la Universidad de Córdoba se refirió a la consecución de la Capitalidad Europea de la Cultura de 2016 y al desarrollo del Parque Científico Tecnológico Rabanales 21, además de otros "retos metropolitanos y regionales".

Para lograr ese nuevo modelo de trabajo, Carrillo advirtió a los consejeros que será necesario "atraer recursos de todo tipo, actuando en red con aquellas instituciones y entidades públicas y privadas de clara incidencia en el territorio".