El profesor de la Universidad de Córdoba Ramón Montes, en su conferencia "Inurria: forma, sentido y sensibilidad", describió al escultor cordobés como un hombre "honesto y sencillo". La de Montes fue la ponencia central de la segunda jornada del congreso "Mateo Inurria y la escultura de su tiempo" que celebra hasta el viernes 4 en el salón de actos de la Facultad de Filosofía y Letras.

Ramón Montes explicó que "las formas" fueron "la principal preocupación" de Inurria, que siempre estuvo "replegado" en su intimidad y su forma de trabajar. El profesor, principal especialista en el escultor, aseguró que fue "amigo de Lagartijo", a pesar de ser antitaurino. "Mateo Inurria frecuentaba las tertulias taurinas porque en ellas se hablaba de arte, poesía y otros temas interesantes", apostilló. Montes denunció el vacío que se produjo por parte de las instituciones respecto a Inurria en un período que va desde 1.943 a 1.981, fecha en la que el profesor comienza a investigarlo. "El Ayuntamiento de Córdoba no tenía constancia de que poseía una serie de esculturas que había donado la esposa de Inurria a cambio de una pensión vitalicia", señaló.

El profesor de la Universidad de Granada Ignacio Henares Cuellar abrió la segunda jornada del congreso con la conferencia "Del historicismo a las vanguardias", en la que manifestó que la investigación esta aún "reescribiendo la historia del arte del siglo XIX y principios del XX". Henares ahondó en su ponencia sobre el concepto de modernidad", ya que "no existe una única idea" sobre ello. Por otra parte, cree que la historia del arte "debería ampliar el estudio de las vanguardias".

Por la tarde, fue el turno de Vicente Méndez Hernán, profesor de la Universidad de Extremadura, quien ofreció su conferencia "La huella de Inurria: Pedro de Torre Isunza". Méndez tomó como punto de partida al escultor cordobés para explicar su influencia sobre el que la prensa consideraba "su discípulo más avanzado", Pedro de Torre Isunza. El docente extremeño indicó que De Torre Isunza coincidía con Inurria en el tema del desnudo. "Mateo Inurria era más purista, mientras que en Isunza había una mayor complacencia por lo femenino y por los detalles", añadió.

La segunda jornada fue cerrada por Moisés Bazán de Huerta, profesor de la Universidad de Extremadura, quien habló en su ponencia "Moisés de Huerta: aportaciones a un contexto histórico" sobre el que fuera su abuelo. Bazán de Huerta declaró que Moisés de Huerta "ofrece aportaciones singulares a la escultura española", algo en lo que coincide con Mateo Inurria. El profesor extremeño destacó "la plasmación de tipos vascos" de De Huerta, ya que algunos tenían "un acento precubista" muy adelantado a su época, concretamente, en el año 1.907. Para Bazán de Huerta, su abuelo "se inclina hacia el desnudo" asimilando "la influencia de Rodin" y toca temas "como el religioso, funerario o monumental".