María José Polo, catedrática de Ingeniería Hidráulica de la Universidad de Córdoba, fue la encargada de explicar, desde su punto de vista, algunas de las cuestiones planteadas en la novela en la que se dibuja un futuro en el que, aunque dista mucho del presente en lo tecnológico, se sigue percibiendo una gran fractura en una sociedad desigual.
El debate, moderado por la coordinadora técnica de la Unidad de Cultura Científica Elena Lázaro, comenzó abordando las similitudes entre el universo que esboza Rosa Montero y la actualidad y la enorme verisimilitud de sus planteamientos. En la obra, la tecnología ha avanzado y las naciones han logrado un sistema de gobernanza mundial, sin embargo, ni el progreso tecnológico ni la unión de las naciones han conseguido una mejora de la sociedad en la que siguen existiendo ricos y pobres.
La pobreza ha cambiado su paradigma y en este escenario, aquellos con menores recursos, no pueden acceder a unas condiciones medioambientales saludables para la vida. Aunque actualmente no tenemos que pagar por respirar aire limpio como en la novela, sí que existe una desigualdad en este sentido ya que las personas pobres suelen vivir en entornos más contaminados que las más pudientes.
El debate sobre el escenario catastrofista en términos ambientales que sugiere Rosa Montero llevó a abordar las teorías de los negacionistas del cambio climático de algunos políticos y dirigentes de grandes corporaciones y los intereses económicos que hay detrás de sus argumentos.
María José Polo también señaló la falta de concienciación sobre las múltiples causas relacionadas con el cambio global que afecta a la opinión pública, merced de la escasez de análisis más profundos en los medios de comunicación. En este sentido, Polo insistió en que el mensaje más generalizado es excesivamente simplista y que los medios proponen como única solución a todos los males ambientales la reducción de las emisiones de C02 y obvian a la vez muchas soluciones a problemas ambientales más cercanos y urgentes, como la gestión de los recursos hídricos o la reducción de la biodiversidad provocada por la actividad humana y sobre la que también se puede actuar individualmente. Sin embargo, “¿estamos todos dispuestos a sacrificar la cerveza a pie de playa por cuidar el medio ambiente?”, llegó a preguntarse la profesora.
Cienciaficcionados tiene como objetivo la promoción de la cultura científica y de la innovación y se enmarca en los objetivos del VI Plan Anual de Divulgación Científica de la Universidad de Córdoba que coordina la Unidad de Cultura Científica y de la Innovación con la colaboración de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades.