Al igual que El Quijote es lectura obligada para todos, para él “hay partes del conocimiento científico que deberían formar parte de la cultura de cualquier persona como las tres leyes de Newton, el teorema de Pitágoras y la Tabla Periódica”. Precisamente esta última es la que ha guiado al académico a visitar la Universidad de Córdoba en un año en el que se conmemora el 150 aniversario de la creación de la Tabla Periódica.
Dada su dilata trayectoria científica y divulgativa, la Facultad de Ciencias de la UCO ha querido contar con él como conferenciante en un ciclo que forma parte del programa diseñado para el Año Internacional de la Tabla Periódica de los Elementos Químicos. Al acto han asistido la decana de la Facultad de Ciencias, María de la Paz Aguilar; la vicerrectora de Posgrado e Innovación Docente, Julieta Mérida; el vicedecano de Movilidad, Internacionalización y Comunicación, Rut Morales Crespo; y el profesor de Historia de la Física, Manuel Sáez Cano que fue el encargado de presentar al ponente.
Durante la conferencia, titulada “Química, Física y la Tabla Periódica. De Mendeléiev a Bohr” José Manuel Sánchez Ron ha realizado un recorrido por el descubrimiento de algunos de los elementos químicos desde la prehistoria y deteniéndose en figuras como Marie y Pierre Curio, descubridores del polonio y el radio y Henry Moseley, que contribuyó a la justificación del número atómico. Ha resaltado también cómo ha ido ampliándose a veces por consideraciones tanto químicas como físicas, lo que pone en valor la Tabla Periódica como nexo de unión para estas dos ramas de conocimiento científico.
José Manuel Sánchez Ron ha publicado más de 400 libros sobre ciencia y es considerado uno de los mejores divulgadores científicos de España. Según el catedrático, el conocimiento científico aún no ha conseguido el lugar que merece dentro de la cultura ya que para él “sólo podrá existir una cultura plena cuando ésta acoja a la ciencia”.
También ha resaltado su importancia para el progreso de un país. “La ciencia es un instrumento que da poder económico, industrial, social y político. Un país necesita ser poderoso en investigación científica y desarrollo si quiere ser uno de los mejores del mundo”, concluye como recomendación a los legisladores para ensalzar el papel de una de las grandes víctimas de la crisis económica en España: la ciencia.