Las clases han comenzado con las máximas medidas de seguridad para alumnado, profesorado y personal de la UCO: ventilación con apertura de puertas y ventanas y doble punto de entrada a las aulas, señalización de los puestos disponibles para garantizar la separación física de seguridad entre estudiantes, implantación de códigos QR en los asientos para control de aforo de las aulas y espacios comunes, rotación presencial de grupos, instalación de cámaras y altavoces en las aulas para retransmisión de clases en directo a los grupos que les toque docencia online, etc. Con los estudiantes de primer curso se ha acentuado la presencialidad dentro de los límites sanitarios de seguridad permitidos. Para el resto de cursos se mantiene una enseñanza bimodal. El número de estudiantes presentes en el aula en los casos que corresponda dependerá de la capacidad del aula, de forma que se pueda mantener la distancia de seguridad. Las clases prácticas serán siempre presenciales. La organización docente podrá, en todo caso, ajustarse en función de la evolución de la pandemia y respetará las normas y directrices de instancias autonómicas y estatales.
Con estas medidas de organización académica, la Universidad de Córdoba quiere, además de la máxima seguridad para la comunidad universitaria, garantizar la máxima calidad de la docencia.